Zona Arqueológica de Tlatelolco
Datos
La Zona Arqueológica de Tlatelolco es una de las Zonas Arqueológicas más impresionantes en la Ciudad de México. Su nombre proviene de Xaltelolco que significa Monte de Arena. Este centro se desarrolló antes de Tenochtitlán y fue el lugar de una de las batallas más dolorosas para los mexicas contra los españoles. Este lugar era uno de los centros ceremoniales estratégicos de la civilización Mexica pues muchas de las tradiciones e historias nacieron en este lugar que aún permite admirarse. Se encuentra en la Colonia Nonoalco Tlatelolco en la Alcaldía Cuauhtémoc.
Esta zona pertenece a nuestra lista de las 49 Atracciones turísticas más visitadas.
Historia[editar | editar código]
Época prehispánica
La historia contada por los antepasados cuenta que este fue un asentamiento fundado sobre un islote como estrategia política para mantener la paz y estabilidad. Anterior a Tenochtitlan, este centro libró decenas de batallas. Una de las más cruentas fue contra los españoles en 1521, pero el desarrollo urbano no decayó por completo y se mantuvo latente, aunque en ruinas, aprovechando sus calzadas, canales y gente.[1]
La ciudad de Tlatelolco fue fundada hacia 1337, 13 años después de la fundación de México Tenochtitlán, por una parte del mismo grupo mexica. Finalmente, poco antes de la llegada de los españoles, Tlatelolco es derrotado por los Tenochcas, capitaneados por AxayÁcatl, en 1473. La historia paralela de Tlatelolco y Tenochtitlán es un claro ejemplo del proceso que vivió el territorio Mesoamericano poco antes de la conquista española, caracterizado por las pugnas por el poder político entre linajes y las expansiones territoriales. No obstante, al mantener un origen y un Dios tutelar (Huitzilopochtli) común, Tenochcas y Tlatelolcas compartían algunas fiestas del ciclo ritual y el mercado, que gran impresión causó en los conquistadores europeos al conocerlo.[2]
Desde Aztlán llegaron a la cuenca de Méxio varios grupos de origen nahua: aztecas culhuas xochimilcas, chalcas tlaxcaltecas, tepanecas y tlahuicas, buscando la tierra ofrecida por su dios Huitzilopochtli. Éste eligio a los aztecas quienes cambiaron su nombre por mexicas, para gobernar la tierra prometida. Durante la peregrinación hubo varios conflictos que dividieron al grupo.
Tlatelolco participó en todas las campañas militares organizadas para conquistar otras poblaciones del México prehispánico, y dirigió el comercio a partir de 1428, cuando los mexicas se liberaron del señorío de Azcapotzalco y trasladaron su mercado, el más importante hasta la llegada de los europeos, a Tlatelolco.
Aunque el poder estaba dividio entre las dos ciudades las diferencias continuaron, y en 1473 se desencadenó una guerra en la que el gobernante de Tlatelolco, Moquíhuix, enfrentó a Axayácatl, pero el gobernante tenochca ganó la batalla. [3] Después de esta guerra, en la que Tenochtitlan reafirmó su hegemonía religiosa y política, y Tlatelolco su hegemonía comercial, el Tecpan de Tlatelolco empezó a usarse también como asiento de los gobernadores militares hasta la Conquista.[4]
En 1515, Cuauhtémoc fue elegido señor de Tlatelolco con lo que la ciudad recuperó su estatus de señorío. Cuatro años después, a la llegada de los conquistadores españoles, Moctezuma Xocoyotzin gobernaba Tenochtitlan; cuando éste murió, Cuitláhuac subió al poder, pero falleció de viruela a los cuarenta días de haber adquirido el cargo. Entonces, los mexicas eligieron a Cuauhtémoc como señor de las dos ciudades; él dirigió, desde Tlatelolco, la resistencia indígena frente a los colonizadores europeos que duró sólo ochenta días, pues fue hecho prisionero por Hernán Cortés el 13 de agosto de 1521.[3]
Aunque la hegemonía política y religiosa le correspondía a Tenochtitlan, la importancia del tianguis era significativa, de ahí que hubiera un Tecpan -“lugar de la casa de piedra” que se traduce como “palacio”- en donde vivía un grupo de jueces que se dedicaba a resolver conflictos que surgían por el intercambio de mercancías y que era sede del control comercial, ahí se recaudaban los impuestos. De este modo, la actividad comercial regía la vida de la ciudad. [4]
El mito
Se cuenta que Huitzilopochtli les dio dos envoltorios llamados quimiles: uno con dos palos de madera y otro con un jade, esta posesión ocasionó una pelea entre el grupo y su separación. Quienes conservaron los palos de madera fundaron Tenochtitlán, mientras que el grupo que conservó la piedra fundó Tlatelolco.
Descubrimientos Arqueológicas
Tlatelolco fue descubierta gracias a las excavaciones arqueológicas iniciadas el 8 de abril de 1944, después de 1960 a 1968 se lograron recuperar 67 estructuras que conforman la zona arqueológica de mayor acervo inmueble expuesto en la Ciudad de México. El área ha sido llamada, a partir de los años sesenta, como la Plaza de las Tres Culturas, ya que reúne en sí los valores históricos de los tres grandes períodos del decurso nacional: el México Prehispánico, el Colonial y el Moderno. Del primer momento tenemos la presencia de más de 27 edificios completos, presididos por las distintas etapas constructivas del Templo Mayor.
En la mecánica de la guerra, los mexicas, toltecas y muchos grupos prehispánicos fueron sangrientos en exceso, por lo que la interpretación de hallazgos de cadáveres y armas sigue en pie, de hecho, algunos de esos vestigios se ubican en el museo del sitio, ubicado dentro del Centro Cultural Universitario.
Actualmente, las ruinas de la Plaza de las Tres Culturas corresponden al recinto ceremonial de Tlatelolco, que guarda semejanzas con Tenochtitlan, tanto en la lógica, como en el objetivo: formar una ciudad donde el tianguis y el comercio fueran la principal actividad.[1]
Las estructuras prehispánicas están distribuidas, principalmente, al sur y norte del Templo Mayor, Templo Mayor Etapa II, Templo M o Calendárico, Templo R, Templo W ó El Palacio, Altar V, Templo Z, Edificios X y L, Coatepantli, Templo A, Altar B, Templo C, Altar D1 y el Templo I y J.[5]
Arquitectura[editar | editar código]
Templo Mayor
Edificio idéntico en medidas, orientación y arquitectura al Templo Mayor de Tenayuca y al de Tenochtitlan en su misma etapa. Estuvo dedicado a Huitzilopochtli —mitad sur del edificio— y también a Tláloc —mitad norte—. Su geometría marca al edificio como el axis mundi, el vértice sagrado donde confluyen los trece cielos, los nueve inframundos y las cuatro esquinas de la tierra. Los mexicas pensaban que por el centro de este templo pasaba el flujo infinito del tiempo en perpetuo movimiento.
Gran Basamento
También conocido como Templo 1 es un edificio de planta rectangular construido totalmente con cantera rosa. Fue descubierto en 1962 por el arqueólogo Francisco González Rul, quien no pudo explorar su interior, por lo que hasta la fecha se ignora cómo fue utilizado. La ubicación y la arquitectura del Gran Basamento permiten plantear que quizá estuvo dedicado a la élite militar tlatelolca al igual que la Casa de las Águilas de Tenochtitlan.
Calendario
El Templo M o Calendario debe su nombre a los petroglifos en los nichos de sus fachadas secundarias, que representan la cuenta de los días; los cuales se encuentran ordenados por trecenas de acuerdo con el Tonalpohualli o calendario ritual de 260 días compuesto de 20 semanas de 13 días cada una. En 1989, en el centro de la fachada principal, se descubrió una pintura mural en la que se representó la pareja creadora del tiempo (Cipactonal y Oxomoco) asociada a los trece días de la cuarta trecena que, junto con las otras tres fachadas, conjunta un total de 52 días; posiblemente ésta sea la cuenta de los 52 años que componían un siglo mexica o Xiuhmolpilli. La investigación del tiempo, sus pinturas murales y las ofrendas asociadas, nos permiten plantear que este templo fue utilizado por el sacerdote mexica llamado Tonalpouhque, quien tenía el conocimiento de los libros sagrados y quien, a partir de los dones de los dioses que regían el año, el mes y el día, y gracias al Tonalpohualli, podía determinar el nombre de los recién nacidos.
Tzompantli Altar A
Es una estructura de planta rectangular con la escalinata de acceso orientada al oeste. La alfarda sur está decorada; en su dado hay un glifo que representa una mano humana. En 1963, se localizaron 170 cráneos humanos, producto del sacrificio por decapitación; éstos se hallaron perforados lateralmente y con los rostros mirando hacia el sur, evidencia de que fueron colocados en hileras sostenidas por un madero, confirmando las narraciones del siglo xvi sobre el altar al que se llamaba Tzompantli o Banderas de cabezas.
Templo Ehécatl- Quetzalcóatl
Su cuerpo principal es de forma circular y su fachada, rectangular, con alfardas laterales que soportan la escalinata de acceso orientada al este. El conjunto fue ofrendado al dios del viento, Ehécatl Quetzalcóatl, para solicitar su intervención ante la sequía que asoló la población entre 1454 y 1458 de nuestra era. Conserva en el interior restos de un adoratorio superior. En 1987 se descubrieron ofrendas que incluían infantes dentro de ollas con figurillas de cerámica.
Referencias[editar | editar código]
- ↑ 1,0 1,1 Tomado de: http://cdmxtravel.com/es/lugares/zona-arqueologica-tlatelolco.html Fecha de consulta 22/05/2020
- ↑ Tomado de: https://www.inah.gob.mx/zonas/118-zona-arqueologica-tlatelolco Fecha de consulta: 22/05/2020
- ↑ 3,0 3,1 Esta información fue obtenida del folleto del Instituno Nacional de Antropología e Historia: https://www.tlatelolco.inah.gob.mx/images/01HOME/FolletoDescargableZAT.pdf Fecha de consulta 22/05/2020
- ↑ 4,0 4,1 Tomado de:http://portal.amelica.org/ameli/jatsRepo/32/326010/326010.pdf Fecha de consulta: 22/05/2020
- ↑ Tomado de: https://sic.cultura.gob.mx/ficha.php?table=zona_arqueologica&table_id=29 Fecha de consulta 22/05/2020