Hostería de Santo Domingo
La Hostería de Santo Domingo es conocida como uno de los restaurantes más longevos de la Capital del país, ubicada en la calle Belisario Domínguez de la Colonia Centro - Centro Histórico de la Alcaldía Cuauhtémoc es uno de los lugares con más tradición histórica y gastronómica en el país, sin mencionar que ocupa el predio del Convento Santo Domingo. Este lugar mítico fue inaugurado oficialmente el 4 de Agosto de 1860 y desde entonces ofrece todos los días un servicio excelente con el típico cariño de la cocina mexicana.
Datos
Orígenes[editar | editar código]
De acuerdo con las Leyes de Reforma promulgadas por Benito Juárez a mediados del siglo XIX, numerosos edificios religiosos fueron fraccionados y vendidos a particulares, quienes los reutilizaron para nuevas actividades, como en este caso, en que parte de lo que fuera el gran convento de los dominicos construido en el siglo XVI se adaptó desde mediados del siglo XIX para la fonda que lleva el nombre del ex convento.[1]
Historia[editar | editar código]
Siglo XIX
El 4 de agosto de 1860, nace la Hostería de Santo Domingo en lo que fuera parte del Convento de Santo Domingo de Guzmán, en la actual calle Belisario Domínguez No. 72 (antes Calle de la Cerca de Santo Domingo El Grande No. 6). Con 157 años, la Hostería de Santo Domingo ha sido testigo de los acontecimientos y cambios que se han desarrollado en el Centro Histórico de ésta ciudad desde aquellos ayeres.
Una de las versiones cuenta que los frailes que habitaban el Convento de Santo Domingo, edificio que ahora alberga a la Hostería y que es considerado como monumento colonial y patrimonio del Centro Histórico de la Ciudad de México, debían un año de cera (cuentas por concepto de velas y veladoras) y no tenían dinero para saldar la cuenta al proveedor; ante esa circunstancia, el procurador del convento solicitó autorización a la mitra para venta de la finca, operación que fue concedida por la cantidad de 800 pesos según consta en las escrituras originales.
Este predio era sólo una parte de la superficie total del convento, ya que la propiedad completa limitaba al sur con la calle de la Cerca de Santo Domingo, al oriente con la calle de los Sepulcros (hoy Brasil), al poniente la calle de la Pila Seca (hoy República de Chile) y al norte con la calle de Las Trancas de Santo Domingo (hoy República de Perú).
El nombre de las calles tenía su origen en su ubicación con respecto a la finca, por ello la calle del sur se nombró “Calle de la Cerca de Santo Domingo”, pues la puerta del Convento daba al sur, la calle oriente se denominó “Calle de tos Sepulcros”, pues ahí se ubicaba el atrio de la iglesia y era utilizado como panteón, la calle poniente se denominó “Calle de la Pila Seca”, ya que en ella existía una pila donde la gente se abastecia de agua para sus casas y esta se secó, la calle norte se denominó “Calle de las Trancas de Santo Domingo”, ya que en ella se encontraba la parte trasera de la Iglesia de Santo Domingo.[2]
La Hostería de Santo Domingo alberga entre sus anchos muros el testimonio de todo lo acontecido desde sus inicios, comenzando con las actividades religiosas de los frailes cuando el edificio funcionaba como convento, hasta ahora, las expresiones de satisfacción de los miles de personalidades que ha probado los más exquisitos platillos de la tradicional Comida Mexicana.
El lugar ha sido tradicionalmente visitado por artistas, políticos y por muchos turistas, nacionales y extranjeros. La visita a este sitio es obligada al pasear por el Centro Histórico, pues es aquí donde pueden degustarse los platillos típicos de la gastronomía mexicana.
Arquitectura
Aunque con modificaciones, el edificio aún conserva las características originales definidas por altos muros en las dos plantas y viguerías de madera, complementado todo con una decoración de carácter nacionalista, en donde el colorido y el gusto por lo mexicano es la constante.
La Hostería cuenta con un mural al fondo del restaurante, convenientemente alumbrado, nos muestra la Plaza de Santo Domingo contemplada de sur a norte, en los primeros años de la vida independiente de México, ahí podemos observar los edificios que rodean la plaza y dentro de ella una diligencia que llega a la ciudad, una carreta arrastrada por cuatro caballos, un evangelista sentado en una mesa donde escribe alguna misiva para un ranchero, el evangelista tiene a la mano una gran sombrilla para extenderla en el caso de lluvia o fuerte sol, un puesto de loza y otro con comestibles, un policía que conduce a un ebrio ensombrerado, clérigos que pasan con diferentes hábitos, niños jugando, gente de frac, guardias de la aduana hoy edificio de la Secretaría de Educación Pública y el antiguo Palacio de la Inquisición, antigua Escuela de Medicina, cabe señalar que el mural fue pintado especialmente para la Hostería por el maestro Antonio Albanés en 1956 y posteriormente fue reproducido en los billetes de mil pesos que circulaban en la década de los años ochentas.[2]
Especialidades de la Casa[editar | editar código]
La hostería merece reiteradas visitas, pues tanto los moles, como los chiles en nogada, así como los gusanos de maguey y los escamoles son cocinados de acuerdo a la rica tradición gastronómica de nuestro país. Por sus más de ciento cincuenta años de tradición, la fonda de Santo Domingo está considerada como la más antigua de la Ciudad de México. [1]
¡El Chile en Nogada!
Cuenta la historia que el 24 de agosto de 1821, Don Agustín de Iturbide, siendo en aquel entonces comandante del ejército trigarante, firmo el “Tratado de Córdoba” y a su regreso a la Ciudad de México, visitó la Ciudad de Puebla el 28 de agosto del mismo año.
Para recibir con honores a tan ilustre visitante, las monjas del convento de Santa Mónica idearon un platillo que simbolizará los colores de la bandera nacional (trigarante) y fue así como crearon el Chile en Nogada.
Desde entonces en la Ciudad de Puebla siempre se recuerda la visita del entonces comandante Agustín de Iturbide. Cada año, el día 28 de Agosto, se celebra la feria del Chile en Nogada.
Actualmente en la Ciudad de México se puede saborear este delicioso platillo los 365 días del año en “La Catedral del Chile en Nogada”[3]
¡Pollo Manchamantel!
El día 5 de mayo se prepara el Pollo Manchamantel, plato originario de Puebla que surge a partir de diferentes mezclas de chiles especies y frutas como plátano macho y durazno, según se dice “aquel que no manche el mantel al comer es porque realmente no comió”.
Anécdotas Geniales[editar | editar código]
El Fantasma de la Hostería de Santo Domingo
Un personaje permanece renuente a abandonar lo que alguna vez fue su hogar, nos referimos al fantasma del monje dominico que aún hace sus apariciones por todo el predio, incluidos los interiores de La Hostería de Sto Domingo. Se trata de un clérigo encapuchado cuya estampa transmite lo mismo misterio que serenidad, pero sobretodo una profunda impresión y sentimiento de vacío para todos aquellos que bajo el manto nocturno le han contemplado.
Se dice que este espectro solamente se deja ver a primeras horas de la madrugada y su principal característica es que a diferencia de otras almas que se niegan a ir a un lugar de descanso eterno, éste permanece casi imperceptible. Algunas versiones aseguran que yace estático, apareciendo siempre en el mismo lugar como si estuviera custodiando un tesoro, una riqueza que yace oculta en los suelos o los muros de adobe de estilo colonial y que probablemente fue consignada a su responsabilidad y por la cual, ahora ha quedado encadenado a este mundo.
Algunas otras versiones aseguran que le han visto vagando por este edificio, como recorriendo los caminos que alguna vez en vida trazó con sus pasos, que ahora sin sombra y sin un cuerpo aparente se siguen repitiendo hasta la eternidad. Esta versión asegura que se trata de uno de los monjes que atendiendo las consecuencias de las Leyes de Reforma, fueron expulsados de su actual convento a finales del S XIX y que murieron en el traslado a una nueva residencia y así sin un último lecho, su alma retornó eternamente a lo que fuera su hogar vitalicio.
Sea como fuere, este personaje que ahora es parte de la cultura popular, es también una evidencia del pasado, que lo mismo que nuestros platillos, se sigue manifestando día a día en La Hostería de Sto Domingo como prueba de un pasado de esplendor que se niega a quedarse atrás y que incluso, hay quienes aseguran que ese gran tesoro que el alma del monje se niega a abandonar es el sazón de las ollas de La Hostería de Sto Domingo, que todos los días, sin faltar uno solo, regalan mil delicias y manjares a todo el que llega hasta nuestro portal. [4]
Personajes Célebres[editar | editar código]
Han disfrutado de sus platillos personalidades como Agustín Lara, Gerardo Murillo “Dr. Atl” y María Félix.
Personajes Inolvidables[editar | editar código]
Reconocimientos[editar | editar código]
Los que estuvieron antes en este Inmueble[editar | editar código]
Referencias[editar | editar código]
Bibliografía[editar | editar código]
- ↑ 1,0 1,1 Tomado de: Javier Villalobos Jaramillo. Los 100 Sitios y Monumentos más importantes del Centro Histórico de la Ciudad de México. En coordinación con la Delegación Cuauhtémoc y el Gobierno de la Ciudad de México.
- ↑ 2,0 2,1 Tomado de: https://jorgalbrtotranseunte.wordpress.com/2011/06/03/la-hosteria-de-santo-domingo-el-restaurante-mas-antiguo-de-la-ciudad-de-mexico/#:~:text=pasajero%20de%20microbuses%E2%80%A6-,la%20Hoster%C3%ADa%20de%20Santo%20Domingo%2C%20el%20restaurante%20m%C3%A1s%20antiguo%20de,Santo%20Domingo%20El%20Grande%20No.
- ↑ Tomado de: https://hosteriasantodomingo.mx/
- ↑ Tomado de: https://hosteriasantodomingo.mx/index.php/blog/el-fantasma-de-la-hosteria-de-sto-domingo