Exconvento Regina Coeli
Datos
El Exconvento Regina Coeli se encuentra ubicada en la calle Regina, de la colonia Centro, en la Alcaldía Cuauhtémoc. Fue una propiedad de las monjas de la Concepción en la época virreinal en México. El edificio está compuesto por la iglesia de Regina Coeli, a la cual se puede entrar gratuita; el exconvento donde se realizan eventos privados y que consta del Patio de los Naranjos, Patios de San Jerónimo y el Jardín de la Estampa; así como el Hospital Concepción Béistegui.
Aunque este inmueble posee cierta sobriedad monacal, destacan los retablos y lienzos de la capilla, los cuales han sido motivo de estudios por parte de especialistas en arte virreinal. En 1863 las monjas fueron exclaustradas y los bienes nacionalizados. En 1867 el presidente Juárez entregó el inmueble al ejército. La última dueña fue Concepción Béistegui, quien adaptó el lugar como hospital.
Afuera de esta construcción se localiza una plaza del mismo nombre en la que se concentran diversos negocios, restaurantes y bares donde se respira un ambiente bohemio. Ya en el siglo XVI se conocía como Plaza Chiquita de Regina.[1]
Historia[editar | editar código]
Época Colonial[editar | editar código]
Poco se ha escrito acerca del llamado «Convento de Santa Lucía de las Convertidas» que supuestamente dio origen al Monasterio de Regina Coelli, ubicado en medio de ciénegas y canales, en el entonces sur de la Ciudad de México. Las religiosas de la Concepción fundaron en 1753 el Convento de Regina adyacente a la Iglesia Regina Coelli.
Al inicio del andador de Regina se levanta el templo que, además de dar nombre a la calle, evoca la oración «Regina Coelli», que refiere a María con su hijo, Jesús resucitado. Sus dimensiones actuales, aún recortadas, esbozan la presencia que tuvieron los conventos virreinales en la Ciudad de México.
El edificio adjunto, el Hospital Concepción Béistegui, también fue parte del convento fundado en el último tercio del siglo XVI con apoyo de Don Melchor de Terreros (ancestro del conocido Don Manuel Romero de Terreros); a este periodo pertenece una de sus dos portadas.
Regina Coelli llegó a poseer y rentar sesenta y dos casas, aunque su sustento provenía también de caridades y obras pías. La segunda fachada, la que conduce al claustro hoy ocupado por el hospital, da cuenta de la remodelación de finales del siglo XVIII. Su arquitectura barroca alude a la sobriedad monacal de las internas, aun cuando los retablos y lienzos de su capilla llegaron a ser de los más elogiados en su época.
Siglo XIX[editar | editar código]
En 1863, a causa de las Leyes de Reforma, las monjas fueron exclaustradas y sus bienes expropiados, pero se reinstalaron durante el imperio de Maximiliano.
En noviembre de 1867, el presidente Juárez las volvió a desalojar y entregó el convento al ejército. Sin que los datos sean del todo claros, se sabe que cuatro años después el inmueble sirvió como pago a Ramón Obregón (quien en 1887, fuera alcalde del Valle de Santiago, Guanajuato), por lo que al circular entre particulares, sus instalaciones, o parte de ellas, exentaron la demolición Juarista. Concepción Béistegui, la filántropa y última propietaria del inmueble, cedió el convento para las instalaciones del hospital, inaugurado en 1886, tal como se revela en su arquitectura ecléctica. En el templo, por su parte, se siguieron oficiando misas, aunque sus retablos, pinturas originales y objetos de plata fueron continuamente saqueados.
En este mismo año, la Fundación para Ancianos Concepción Béistegui cambia de hospital para iniciar un asilo para el cuidado de personas adultas mayores que no pueden valerse por sí mismas. Esta Institución de Asistencia Privada es hasta nuestros días reconocida por su labor de compromiso y calidad humana.
Siglo XXI[editar | editar código]
Las obras de restauración que, junto con el Instituto Nacional d eAntropología e Historia se llevaron a cabo en el Ex Convento, permitieron redescubrir el Patio de los Confesionarios, el Coro bajo de la Capilla Medina Picazo, inigualable por sus dorados retablos de estilo barroco y el Jardín de la Estampa.
Dentro del Corredor Cultural del Centro Histórico ponemos a su disposición un escenario de incomparable grandeza para la realización de eventos rodeados de historia y magnificencia, en donde se conjuntan la belleza colonial con los servicios más funcionales y modernos.[2]
Historia eclesiástica[editar | editar código]
Proceso de construcción[editar | editar código]
Arquitectura[editar | editar código]
Fachada[editar | editar código]
La fachada principal compuesto por 2º accesos idénticos y un 3º más pequeño, sin mucho de talle en el parlamento.
Se puede ver la torre del campanario, La cúpula y los escritos en azulejo.
La fachada está dividida por distintos claros divididos por pilastras, correspondientes a las bóvedas internas. Estas pilastras tienen una gárgola para desalojar el agua pluvial y en su remate una almena.
Cuenta con 2 grandes ventanas de gran altura, sin acabados de marcos de ningún tipo únicamente a ébano y un dintel.
La ornamentación de los accesos es la siguiente manera:
- El acceso es un arco de medio punto, custodiado por 2 pilastras cuadradas de capitel corintio. En el establecimiento y las enjutas se observan grabados de flores y ramas. En medio del frizo de ese entablamiento se encuentra el símbolo de la orden de las concepciones.
- Entre del frizo y la cornisa hay una serie de mútulos muy pequeños, Cabe resaltar que este templo con tiene imágenes agustinas, dominicanas y franciscanas
- En la parte superior del marco del acceso se encuentra una escena en alto relieve, contenida en un acordado y custodiado por una pilastra cuadrada de capital corintio a cada lado.
- El entablamiento se encuentra fracturado en los quiebres del borde de la fachada.
- El frontón está incompleto por la parte inferior y superior, además de un tímpano con una venera. Tanto los extremos del frontón, como del acodado están presentes una acrotera de cada lado.
- El 3er marco es muy simple y más pequeño, la puerta esta en arco de medio punto de novedas posadas en una pilastra cada lado y custodiadas por 2 pilastras de mayor tamaño y no pertenecientes a ningún orden clásico.
- La enjuta tiene grabados de ramas y flores.
- En el entablamiento se encuentra el arquitrabe del frizo la cornisa sin más detalle.
- En la parte superior se encuentra una hornacina dentro de 2 pequeñas pilastras, un entablamiento simple y un frontón incompleto de la parte superior, ahí yace un espacio para el escudo del templo tanto.
- El frontón de la hornacina como a los costados de este se encuentran por cada lado una acrotera.
En la fachada principal se tiene letreros en azulejos que conmemora la celebraciones de los centenarios cumplidos por la construcción
El exterior[editar | editar código]
El interior[editar | editar código]
Descripción del Ex - Convento[editar | editar código]
Como la gran mayoría de las Iglesias de la ciudad de México la planta del templo no es ni de cruz griega ni latina se conforma de una sola nave dividida en bóvedas. Cuenta con una torre de campanario y una cúpula de forma octogonal.
El ex - convento se encuentra en buen estado y se conserva casi original.
La fachada occidental[editar | editar código]
Interior[editar | editar código]
El órgano[editar | editar código]
Disposición[editar | editar código]
Campanas[editar | editar código]
El campanario de lado izquierdo de la fachada principal y junto al ex – convento se encuentra la torre que está al igual que la fachada en su base no cuenta con ningún detalle.
En un punto más alto del campanario cuenta con 2 cuerpos, el primero es una continuación de la forma cuadrada de la torre, pero ochavada, en cada cara un arco de medio punto que deja ver las campanas. El cuerpo superior está compuesto por una replicada en proporción menor de la primera.
Cada cara del campanario está dividida por pilastras de capitel de orden jónico.
El la cornisa de la torre, una especie de almeja o acrotera corona cada esquina de la cornisa de la torre.