Convento de San Francisco

De WikiCity
Ir a la navegación Ir a la búsqueda

Datos

Época

Convento de San Francisco

Convento de San Francisco

Alcaldía
Dirección
Av Francisco I. Madero 7, Centro Histórico de la Cdad. de México, Centro, Cuauhtémoc, 06000 Ciudad de México, CDMX
Cargando el mapa…
Coordenadas
19° 26' 1.03" N, 99° 8' 24.50" W

El Convento de San Francisco es uno de los 49 Inmuebles demolidos más recordados de la Ciudad de México. Se encontraba en la Colonia Centro - Centro Histórico. Enclavado en el corazón de la Nueva España, el conjunto conventual de San Francisco fue sede de la primera fundación religiosa que se asentó en el virreinato, así como el primer centro educativo del Santo Evangelio.[1] Fue el primer y mayor convento franciscano de la Ciudad de México, patrocinado por Hernán Cortés en 1524. El templo, tal y como se encuentra actualmente, es resultado de la reedificación realizada en 1716. Era considerado el convento más grande de América hasta su demolición en 1857; desde esos años sólo se conserva este Templo y la capilla Balvanera. Destacan la fachada de estilo churrigueresco del siglo XVII y el retablo del altar mayor, obra de Jerónimo Antonio Gil, el cual fue reconstruido en los años cuarenta del siglo XX.[2] En la actualidad, una parte del terreno que ocupaba el gran convento está ocupado por calles e inmuebles, entre los que destaca la emblemática Torre Latinoamericana.

Historia[editar | editar código]

Convento de San Francisco.png

Colonial[editar | editar código]

Después de Texcoco, el convento de San Francisco fue una de las edificaciones más antiguas siendo además la sede de la primera escuela de artes y oficios que existió en la Nueva España. El primitivo Convento de San Francisco y su iglesia humildísima fueron concluidos en 1525, como lo afirma Motolinia: “El año de mil quinientos veinticinco se hizo la Iglesia de San Francisco de México. La Iglesia es pequeña; la capilla es de bóveda que la hizo un cantero de Castilla. Maravillávanse mucho los indios de ver cosa de bóveda, y no podían  creer que al quitarle las cimbras toda había de venir abajo”. El primer templo del que nos habla Motolinia, fue levantado en un vasto terreno que era propiedad del emperador Moctezuma, donde había un gran estanque con multitud de jaulas “con todo linaje de aves”. (GTRM, 1988)[3]

Convento de San Francisco 2.jpg

Al llegar a Tzintzuntzan, los franciscanos construyeron una capilla y convento de adobe y paja, en las laderas arriba del actual poblado. Sin embargo, a los españoles les resultaba poco conveniente el sitio por la dificultad de subir al templo a caballo, por lo que se optó por desplazarlo a las tierras planas en la parte baja del asentamiento. Las primeras construcciones en el actual sitio fueron dirigidas por fray Juan de San Miguel, quien llegó a Tzintzuntzan con Vasco de Quiroga. El actual conjunto data del último tercio del siglo XVI y dirigió su construcción fray Pedro de la Pila. El conjunto está conformado por el atrio, la capilla abierta, el templo, el claustro, los restos de la capilla de la Tercera Orden, un templo dedicado a Nuestra Señora de la Soledad y una segunda capilla abierta asociada al hospital.[4]

Convento de san francisco maqueta.jpg

Hacia finales de 1526 o 1527 se erigió una capilla muy simple, del tipo llamado "abierto" (capilar abierto), es decir, un simple revestimiento de techo sostenido por pórticos. Esta capilla sirvió principalmente para sostener a los numerosos indios que llegaron a las instrucciones doctrinales que dieron los frailes. Esta fue la Capilla de San José. Al mismo tiempo, el director de la construcción, Fray Pedro de Gante estableció en el patio del convento su reconocida Escuela de Artes y Oficios, la primera de su tipo en el continente americano. El convento original debe haber sido contemporáneo con el Iglesia. Juzgamos que era muy pequeño, porque la mayor parte de las asambleas que tenían los frailes en aquellos tiempos (1525-1535) no eran celebradas aquí, la casa madre, sino en Huejotzingo, Cholula, o alguna otra ciudad más pequeña donde, aparentemente, había más espacio para acomodar a los numerosos religiosos que asistieron.[5]

Poco antes de 1547, el primer obispo y arzobispo de México, Fray Juan de Zumirraga, apreciando la insuficiencia del convento y la extrema necesidad de los frailes, les construyó una buena enfermería dentro de los confines del mismo convento. Propuso además construir para ellos otra ala del monasterio, o, según el propia expresión del prelado, un dormitorio. Esto de hecho lo hizo en breve antes de pasar a su eterna recompensa (3 de junio de 1548). Como resultado de esta acción caritativa, el buen arzobispo dejó una deuda sustancial a su excelente mayordomo, don Martín de Aranguren.[5]

Alrededor del año 1569 se consideró necesario renovar el convento. Dofia Beatriz de Andrada construyó la nueva enfermería a sus expensas, la sala de De profundis y el noviciado. Pero el trabajo nunca se completó, y en el año 1585 el Visitante, Fray Alonso Ponce, descubrieron que el monasterio "quedó inacabado... porque habían derribado el viejo y estábamos en el proceso de construir el nuevo uno, y en ese momento el gran salón de dos pisos estaba terminado y dos dormitorios en los que habitaban los frailes y otro de una historia y la enfermería."[5]

1850[editar | editar código]

El 1° de septiembre de 1856, Vicente Pagaza mayor del Cuerpo Militar de Nacionales "'Independencia", acompañado de los capitanes Valdés y Salazar, que tenían su cuartel en un ala del Convento de San Francisco, descubrieron en el atrio del mismo a un grupo de personas que supusieron tramaban una conspiración. Los sospechosos se refugiaron en el interior del convento y fueron aprehendidos en la celda del padre superior, llamado Magna Grecia. A consecuencia de esta real o supuesta conspiración, el 16 de septiembre del mismo año el presidente Comonfort publicó un decreto en que disponía que en el término de quince días, se abriera la calle llamada Callejón de Dolores, hasta comunicar con la de San Juan de Letrán, la cual se llamaría de la Independencia. Este decreto suprimía también el convento de franciscanos en la ciudad de México, por lo cual se procedió a demoler la enfermería, la cocina, varias celdas y parte de la huerta del convento.[6]

1857[editar | editar código]

El 19 de febrero de 1857 se concedió permiso a los franciscanos de volver a su convento, ocupando la parte que no había sido demolida, es decir, del lado de la iglesia mayor, donde permanecieron hasta el día 28 de diciembre de 1860, a consecuencia de la publicación de las Leyes de Reforma, que suprimían las órdenes monásticas. Al año siguiente el convento fue fraccionado en nueve lotes para facilitar su venta. En 1861, se abrió la calle de Gante y se inició la demolición de varias capillas. El templo fue ocupado como caballerizas y bodegas del Circo Chiarini, pasando después al culto protestante. [6]

Las dependencias que cerraban el atrio, eran la habitación y el jardín del capellán de Aranzazú, abierta la calle de Gante, la capilla de Aranzazú por un tiempo sirvió de bodega y cabrería y finalmente se levantó sobre ella, el templo actual de San Felipe, la capilla de la Tercera Orden, en cuyo terreno se levantó una casa particular y el actual Hotel Guardiola. Entre estos dos templos, se abría el atrio con su portada que daba a la calle de San Francisco (hoy Francisco I. Madero) y en la esquina se encontraba la celda del capellán y las habitaciones del padre provincial. [6]

Por la calle de San Juan de Letrán, estaba la Capilla de los Dolores, pequeña y magnífica, que también era llamada de la Segunda Estación y según Alfonso Toro correspondía a la Tercera; inmediatamente estaba la otra portada que daba acceso al atrio por la mencionada calle. En seguida estaba la Capilla del Señor de Burgos, sustituida por la casa que llevó el número seis de San Juan de Letrán y que ocupó parte del atrio y su muro posterior quedó adosado a la fachada del templo grande. Junto estaba la celda del capellán del templo y, finalmente, el cuartel, parte del cual fue demolido al abrirse la calle de la Independencia, al descubrirse la conspiración.[6]

Historia eclesiástica[editar | editar código]

Arquitectura[editar | editar código]

Para el año de 1586 el visitador de la orden de los franciscanos, el padre Ponce, hace mención que encontró al convento "bueno, acabado, hecho de cal y canto, con su claustro, dormitorio e iglesia". En el paramento del muro sur de la arquería aparece una piedra muy erosionada y fechada en 1596, indicando probablemente la terminación del edificio; le sigue en orden de antigüedad la capilla abierta que se ubica frente al templo. Posteriormente y a mediados del siglo XVII, se reconstruye el templo y el claustro actual, lo cual se manifiesta en una inscripción de una viga de madera que forma parte de la techumbre del corredor norte de la planta alta, ésta señala el año de 1651.[4]

El convento de estos frailes abarcaba más de 30 mil metros cuadrados de terreno, cuyos límites actuales serían la calle de Madero y la de Venustiano Carranza, de largo, y de fondo el Eje Central y más un poco más allá de Gante. Quien acude a la panadería Ideal de 16 de septiembre aún puede identicar los arcos de piedra que formaban parte del convento.[7]

Interior[editar | editar código]

Disposición[editar | editar código]

Campanas[editar | editar código]

Otras observaciones[editar | editar código]

Referencias[editar | editar código]

Bibliografía[editar | editar código]

  1. Raúl Nieto García, "El convento grande de San Francisco", en BITÁCORA ARQUITECTURA. Número 3, 2000, pp. 13-19.
  2. Tomado de: https://www.mexicoescultura.com/recinto/67398/templo-y-convento-de-san-francisco-de-asis.html.
  3. Tomado de: http://fernandosaldana-artecultura.blogspot.com/2013/01/el-convento-de-san-francisco-de-la.html.
  4. 4,0 4,1 Tomado de: https://mediateca.inah.gob.mx/repositorio/islandora/object/guia:211.
  5. 5,0 5,1 5,2 Fidel de J. Chauvet, "The Church of San Francisco in Mexico City" en The Americas, Vol. 7, No. 1 (Jul., 1950), pp. 13-30.
  6. 6,0 6,1 6,2 6,3 Monterrosa Prado, M. El Convento de San Francisco de Mexico. Anales Del Instituto De Investigaciones Estéticas, 13(46), 1976, pp.197-200.
  7. Tomado de El Universal: https://www.eluniversal.com.mx/opinion/mochilazo-en-el-tiempo/los-grandes-conventos-capitalinos-que-ya-no-estan.