Banco Nacional de México (Oficinas)
El Banco Nacional de México cuenta con un inmueble en la calle Isabel La Catolica número 44 en la Colonia Centro - Centro Histórico en la Alcaldía Cuauhtémoc. Su extraordinaria fachada barroca obra del arquitecto Francisco Guerrero y Torres es una de las particularidades de este lugar, además de ser un edificio que data de 1772 lo que lo convierte en un lugar lleno de historia y por lo tanto un lugar emblemático en el Centro de la Ciudad. El Banco Nacional de México ocupo sus instalaciones en el año 1882.
Datos
Historia[editar | editar código]
Este espléndido ejemplo del barroco del Centro Histórico, es obra del arquitecto Francisco Guerrero y Torres, quien en su edficación utilizó cantera y tezontle que ornamentó con detalles de talavera poblana.[1]
Siglo XVI
Hernán Cortés fue el dueño de este predio, que en ese tiempo era un solar. Luego pasó a manos de Juan Cermeño, quien empezó a edificar la casona. para la construcción se utilizaron piedras prehispánicas. [2]
Siglo XVIII
José Miguel de Berrio y Zaldívar y su esposa Ana María de la Campa y Cos, condes de San Mateo Valparaíso, quienes tenían negocios en la minería, la agricultura y la ganadería, se convirtieron en los dueños del inmueble en el siglo XVIII. Dichos condes encomendaron la restauración del palacio al arquitecto Francisco Antonio de Guerrero y Torres. La construcción tardó dos años y medio, de 1769 a mayo de 1772.
El edificio, inagurado en 1772 por órdenes de Miguel de Berrio y Zaldívar, primer Marqués de Jaral de Berrio y Conde de San Mateo de Valparaíso, cuenta con un acceso central que conduce al primer patio de los dos con que cuenta el inmueble. La escalera constituye un aspecto notable del palacio, por tener una doble rampa de embarque. Sus escalinatas suben en forma de espiral hasta las habitaciones del entresuelo y del piso superior. Una magnifica cúpula remata la escalera y se adosa al domo de la capilla familiar. Externamente el monumento conserva todos los elementos originales; destaca el trabajo de cantería en jambas, marcos, nichos y portadas, así como las puertas de madera, que son verdaderas obras de arte.
Siglo XIX
El palacio perteneció a los descendientes de los condes hasta 1867, después pasó a manos de Clemente Sanz y luego a su hija, quien lo vendió al Banco Nacional Mexicano en 1882. Actualmente es parte del Banco Nacional de México, el cual es el resultado de la fusión entre el Banco Nacional de Mexicano y el Banco Mercantil Mexicano.[2]
En 1882 fue ocupado por el Banco Nacional de México, recién fundado entonces, que estableció ahí sus primeras oficinas y lo conserva, en excelentes condiciones, como su casa matriz hasta la fecha.
El arquitecto Teodoro González de León construyó un nuevo edificio hacia el lado oriente, el cual se integró al monumento con elementos inspirados en el viejo palacio, así como con texturas y colores que armonizan con él, conformando un bello conjunto.[1]
Anécdotas Geniales[editar | editar código]
Debido a que esta construcción fue hecha con piedras prehispánicas se dice que en el edificio se escuchan ruidos y pasan cosas extrañas. Muchos de los trabajadores del Banco de México han hablado de los ruidos que pueden escucharse al interior del inmueble cuando hay menos movimientos y éste se encuentra casi vacío. Las personas dicen que esto es gracias a que el edificio se construyó con piedras que pertenecían a algunos templos prehispánicos.
Referencias[editar | editar código]
- ↑ 1,0 1,1 Tomado de: Javier Villalobos Jaramillo. Los 100 Sitios y Monumentos más importantes del Centro Histórico de la Ciudad de México. En coordinación con la Delegación Cuauhtémoc y el Gobierno de la Ciudad de México.
- ↑ 2,0 2,1 Tomado de: https://www.maspormas.com/ciudad/la-historia-del-banco-nacional-de-mexico-casona-de-condes/
- ↑ Tomado de: Javier Villalobos Jaramillo. Los 100 Sitios y Monumentos más importantes del Centro Histórico de la Ciudad de México. En coordinación con la Delegación Cuauhtémoc y el Gobierno de la Ciudad de México.