Faro Aragón
Datos
El Faro de Aragón (Fábrica de Artes y Oficios) esta ubicado en la Colonia San Juan de Aragón Primera Sección en la Alcaldía Gustavo A. Madero en la Ciudad de México. Las Fábricas de Artes y Oficios, conocidas popularmente como Faros, surgieron como un proyecto para generar cultura y crear interés en la sociedad por las disciplinas artísticas y artesanales.
Historia[editar | editar código]
Fecha de fundación: 17 de junio de 2016.
Ubicado en lo que fue el antiguo Cine Corregidora que durante los años setenta y ochenta fue el centro de entretenimiento más importante y un referente para la dinámica cultural de la zona, el Faro Aragón es una aportación importante a la infraestructura cultural del norte de la Ciudad de México y, por su perfil, permite contribuir a la formación de guionistas, cinefotógrafos, editores, iluminadores y realizadores, entre una amplia gama de oficios que interactúan en las artes audiovisuales.
El Faro de Aragón nace con un gran reto: seguir impulsando y fortaleciendo las prácticas y necesidades culturales emanadas desde y para su comunidad a partir de procesos de formación y divulgación y, por otro, construir una propuesta formativa con un acento en los medios audiovisuales que, además de democratizar su acceso a través de diversos esquemas de educación no formal, reconozca la producción artística y cultural como un proceso social colaborativo más allá de la creación individual.
El nuevo espacio ha contado con la colaboración del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) y la Filmoteca de la UNAM, del Centro de Capacitación Cinematográfica, del IMCINE, de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas y de la Secretaría de Cultura del Gobierno Federal, entre otras instituciones.[1]
Arquitectura[editar | editar código]
De 1993 al 2015, el antiguo Cine Corregidora estuvo abandonado. Luego de una inversión de poco más de 36 millones de pesos en obras de rehabilitación y construcción, así como para su equipamiento, el edificio vuelve a constituirse en un espacio para el arte y la cultura.
Las obras de rehabilitación del edificio (proyectada esta ocasión por el arquitecto José Allard Contreras en colaboración de Arturo García Bautista, Cristóbal Magaña y Francisco Castillo Moreno) comenzaron en 2012, cuando se invirtieron 8.5 millones de pesos para reforzar la estructura del inmueble, cambiarle la cubierta e intervenir el vestíbulo principal. También se invirtió en la instalación eléctrica e iluminación del vestíbulo y se intervino la fachada en un 40 por ciento.
El 2014, el proyecto concursó en el Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los Estados (PAICE), de la Secretaría de Cultura del Gobierno Federal, bajo la modalidad de proyecto estratégico, y le fueron asignados 17.5 millones de pesos, con los que también se cubrió el costo de la supervisión de la obra.
En esta fase se continuaron las instalaciones eléctricas e hidrosanitarias del inmueble, la intervención del vestíbulo principal y de la fachada. También se instaló un montacargas, se habilitó una sala de cine con capacidad para 156 personas, se construyeron un salón de usos múltiples que albergará talleres para teatro, danza y estudios del cuerpo en general, un salón de edición, producción y post producción, espacios para oficinas generales, y un salón para pequeñas presentaciones y clases teóricas.
Además, se habilitó un escenario de usos múltiples para cine, teatro, danza y conciertos, y se construyó una plaza de acceso.
Para el equipamiento del inmueble, en 2015 se destinaron 9.5 millones de pesos, en la compra de cámaras de grabación de cine, computadoras para edición, producción y postproducción; un escenario principal con audio e iluminación escénica, un proyector de cine y equipo para actividades culturales y artísticas. También se destinaron poco más de 800 mil pesos para la operación inicial del espacio cultural.[1]
El Faro Aragón buscó conservar los rasgos originales del Cine Corregidora, obteniendo resultados más funcionales que radicales. Pero, aún cuando muchas de las modificaciones a la estructura operan solamente como intervenciones, Allard mantuvo un espacio familiar a los habitantes de la colonia San Juan de Aragón. Sin imponer un nuevo diseño a la escala de los alrededores (a su manera, el Cine Corregidora ya había modificado el paisaje del territorio), el Faro entrega, después de obstáculos referidos a su construcción, un nuevo espacio público con consecuencias culturales.
Espacios[editar | editar código]
Cuenta con una oferta permanente de servicios culturales, a través de una ludoteca comunitaria, un libro club, proyecciones cinematográficas, exposiciones, conferencias, presentaciones, charlas, presentaciones de libros, servicios a la comunidad, conciertos, entre otros.